Como se siembra el mango

El mango es una deliciosa fruta tropical que se caracteriza por su dulzura y su jugosa pulpa. Si te gustaría disfrutar de mangos frescos y cultivados en casa, puedes intentar sembrar tu propio árbol de mango.

Aquí te explicaré paso a paso cómo hacerlo.

Preparación del terreno

Lo primero que debes hacer es encontrar una ubicación adecuada para el árbol de mango. El mango prefiere suelos bien drenados y con buena exposición al sol.

Asegúrate de elegir un lugar en tu jardín donde el árbol pueda recibir al menos 6-8 horas de luz solar directa al día.

Una vez que hayas seleccionado el lugar adecuado, es hora de preparar el terreno. Remueve cualquier hierba o maleza que pueda competir por los nutrientes con el árbol.

Sigue estos pasos y podrás germinar un hueso de mango en tu propia casa sin complicaciones

También es recomendable cavar un agujero profundo y ancho, aproximadamente dos veces el tamaño del cepellón del mango.

Siembra del mango

Antes de plantar la semilla del mango, debes asegurarte de que esté madura. Para ello, elige un mango maduro y quítale la pulpa. Luego, puedes dejar la semilla secar mangoo sol durante unos días.

Una vez que la semilla esté seca, puedes plantarla directamente en el agujero que has preparado en el terreno.

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Asegúrate de colocarla en posición vertical, con el extremo puntiagudo hacia arriba, y cubrirla con tierra hasta que quede totalmente enterrada.

Después de sembrar la semilla, riega abundantemente el terreno para asegurar una buena humedad y facilitar la germinación del mango. Asegúrate de mantener el terreno húmedo, pero evita el exceso de agua que pueda provocar el pudrimiento de la semilla.

Cuidados posteriores y crecimiento

Una vez que la semilla haya germinado y empiecen a surgir las primeras hojas, es importante proteger el árbol de las heladas y de simebra fuertes vientos.

También es recomendable abonar el suelo con fertilizante rico en nutrientes para favorecer un CComo saludable.

Durante los primeros años, es importante regar el árbol de mango regularmente, especialmente durante los períodos de sequía. A medida que el árbol crezca, podrás espaciar los riegos, pero recuerda que el mango necesita un suministro constante de agua para producir frutos de calidad.

En resumen, sembrar un mango requiere de paciencia y cuidados, pero el resultado vale la pena.